Pequeñas Empresas Británicas Detienen Ventas a Irlanda del Norte por Nuevas Normas de la UE

Algunas empresas de pequeña escala en Gran Bretaña cesarán sus ventas a clientes en Irlanda del Norte el mes próximo, debido a las nuevas normativas de seguridad de productos que ha implementado la UE. Las nuevas regulaciones, que se pondrán en marcha el 13 de diciembre, son parte del Reglamento General de Seguridad de Productos (GPSR) de la Unión Europea y se implementarán en Irlanda del Norte, dado que la región pudo mantenerse en el mercado exclusivo de productos de la UE después del Brexit.

¿Por qué Irlanda del Norte se Mantiene Alineado con las Reglas de la Unión Europea?

Aunque el Reino Unido abandonó la UE, Irlanda del Norte continúa acogiendo las regulaciones de la UE en cuanto a los bienes. Esto genera nuevas exigencias de cumplimiento para las compañías británicas que comercializan productos a consumidores en Irlanda del Norte y la Unión Europea. Dentro de estos requerimientos se incluye la exigencia de un “responsable de cumplimiento”—un agente de cumplimiento asignado que tiene la responsabilidad de asegurar que los productos se ajusten a las regulaciones de protección.

Es necesario un encargado de cumplir con cualquier producto producido fuera de la UE o de Irlanda del Norte. Este representante debe estar situado en la Unión Europea o en Irlanda del Norte y funciona como el interlocutor oficial en asuntos relacionados con la seguridad y el cumplimiento de los productos.

¿Qué retos afrontan las empresas de pequeña escala?

Para numerosas pequeñas empresas, particularmente en áreas como la moda, la papelería y los artículos artesanales, las recientes regulaciones del GPSR suponen retos considerables. Samantha Paton, dueña de la marca independiente de moda Isolated Heroes en Dundee, ha manifestado su inquietud. “Voy a cancelar nuevos pedidos a Irlanda del Norte y la UE a partir del 12 de diciembre hasta que comprenda cuánto puedo costear para satisfacer estos nuevos requerimientos”, declaró Paton.

¿Cuál será el precio de acatar las nuevas reglas?

Una de las mayores barreras para las pequeñas empresas es el gasto vinculado al acatamiento de las nuevas regulaciones. Algunos proveedores de servicios han empezado a proporcionar aplicaciones de responsable de cumplimiento para asistir a las compañías en el cumplimiento de las normativas, aunque estos servicios conllevan un costo. Paton detalla que, conforme las compañías incorporan sus productos a estas aplicaciones, se presentan distintas tarifas y categorías para cada artículo. “Ya sea que emplees un representante directo o una aplicación de terceros, existirá un gasto considerable para las empresas de pequeña escala”, expresó.

¿De qué manera estas nuevas regulaciones perjudican a las empresas de artesanías?

Los emails a los clientes y las acciones en redes sociales de pequeñas empresas indican que muchas de ellas están batallando con el peso financiero extra. Una empresa de ilustración y papelería en Manchester publicó en Instagram: “Soy una pequeña compañía unipersonal y no poseo el capital, los medios ni el tiempo necesarios para aplicar estas nuevas regulaciones. Así pues, a partir del 13 de diciembre, no podré comercializar con la UE e Irlanda del Norte. Realmente, el Brexit es el obsequio que continúa ofreciendo.

Las nuevas regulaciones también impactan a los comerciantes que funcionan en plataformas de e-commerce relevantes como Amazon y eBay. Estas plataformas han reaccionado proporcionando guías y listando proveedores que pueden colaborar en la implementación del GPSR. No obstante, el gasto extra y la burocracia podrían parecer inviables para numerosos pequeños empresarios.

¿Qué asistencia están proporcionando las plataformas de comercio electrónico?

Plataformas de e-commerce como eBay han actuado para brindar guía a sus comerciantes. Por ejemplo, eBay ha suministrado a sus comerciantes un listado de proveedores que brindan servicios de cumplimiento con el GPSR. A pesar de que este respaldo es beneficioso, los gastos relacionados pueden resultar inviables para numerosas pequeñas empresas. Además de las tarifas por cumplimiento, los requisitos de etiquetado recientes también añaden un peso burocrático.

¿De qué manera la UE Busca Potenciar la Protección al Consumidor?

Las regulaciones del GPSR han estado en desarrollo desde 2020 y, en mayo de 2023, obtuvieron la aprobación del Parlamento Europeo. El propósito de las normativas actualizadas es brindar una mayor protección a los consumidores al realizar compras en línea y optimizar el procedimiento de retiro de productos. No obstante, las compañías que no estén listas para estos cambios encontrarán complicado satisfacer los nuevos requerimientos, en particular las que comercializan productos de manera transfronteriza a Irlanda del Norte y la Unión Europea.

¿Qué asistencia está brindando el Gobierno a las empresas pequeñas?

Un representante del Departamento de Comercio y Negocios del Reino Unido calmó a las compañías, garantizando que existiría respaldo disponible. “Estamos respaldando a las pequeñas y medianas empresas (PYME) de todo el Reino Unido para su preparación para el GPSR, y en breve, vamos a publicar más directrices”, declaró el representante. “Seguiremos monitoreando la situación y mantendremos interacciones con las compañías para garantizar que puedan realizar comercios de manera libre”.

A pesar de estas protecciones, se anticipa que el efecto del GPSR en el mercado interno del Reino Unido sea restringido, dado que se piensa que las normas establecen la forma en que numerosas compañías ya están funcionando. No obstante, la implementación abrupta de estas nuevas normativas continúa siendo una gran inquietud para las pequeñas empresas que se apoyan en las ventas a Irlanda del Norte y la Unión Europea.

¿De qué manera las pequeñas empresas tratarán estas nuevas reglas?

Conforme se aproxima la fecha de vencimiento, los dueños de pequeñas empresas como Samantha Paton se encuentran con la incertidumbre generada por nuevas normativas que podrían forzarlas a paralizar las ventas a nivel internacional o a invertir considerablemente en el cumplimiento. Numerosas compañías todavía desconocen el costo de acatar los nuevos estándares, ni si resultará económicamente rentable seguir comercializando con clientes en Irlanda del Norte y la UE.

Las nuevas normativas representan otro reto para las pequeñas empresas después del Brexit, dejando a muchos cuestionándose cómo podrán afrontar los gastos y la complejidad de las nuevas regulaciones sin comprometer su factibilidad.

Jacobs |

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